CAMINANTE POR LA PAZ LLEGA A BOGOTÁ

Gustavo Moncayo llega este miércoles al corazón de Bogotá.
Ha caminado desde hace 46 días un trayecto que lo ha convertido en centro de la atención nacional.
Su demanda: lograr un acuerdo humanitario entre el gobierno y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Y dentro de ese acuerdo, el reclamo que mueve a Moncayo: la liberación de su hijo y de todos los secuestrados.
"Seguiré luchando"
Un reclamo que lo hizo salir de su casa, hipotecarla, dejar su trabajo de maestro y andar a pie más de 850 kilómetros desde Sandona, Nariño, cerca de la frontera con Ecuador.

Al hablar en el programa BBC Mundo Hoy, Moncayo, de 52 años, aseguró que piensa establecerse en la Plaza de Bolívar hasta que se logre "cristalizar todo lo relacionado con el acuerdo humanitario, la liberación de todos los secuestrados".
Al centro de Bogotá
"Voy a luchar hasta que pueda abrazar al último de los secuestrados. Ese día dejaré mis cadenas, las he llevado más de nueve meses.
Voy a luchar hasta que pueda abrazar al último de los secuestrados. Ese día dejaré mis cadenas, las he llevado más de nueve meses
Gustavo Moncayo"Dejaré como un símbolo para la historia de que hubo un ciudadano, un padre de familia que dejó todo a su paso, dejó hogar, dejó su trabajo, dejó todo para ir en busca de la liberación de todos los secuestrados", afirmó Moncayo.
Su hijo Pablo Emilio, joven militar, fue secuestrado por la FARC en 1997, y desde entonces Moncayo no ha sabido nada de él.
Sus últimos kilómetros de caminata han sido lentos principalmente por la recepción que tiene en las calles de la capital. Entre las más de 30 personas que caminan con él, están sus hijas Carol y Yuri Tatiana.
A su arribo a la Plaza de Bolívar, situada a unos metros del Palacio presidencial y del edificio del congreso, miles de personas se habrán sumado a su marcha, entre familiares de secuestrados, ONGs y bogotanos en demanda de la paz y del acuerdo humanitario.
Moncayo quiere ser recibido, "como ciudadano que merece respeto" por el presidente colombiano, Álvaro Uribe, aunque está seguro de que tanto el mandatario y las FARC recibieron su mensaje.
"El mensaje está dado, ellos conocen cuáles son los planteamientos", dijo a BBC Mundo Hoy.

Secuestrados

"Si hablamos únicamente de intercambio humanitario, no habrá ningún arreglo y seguirá la violencia, entonces, lo que se propone es que desde un acuerdo humanitario se recoja toda la problemática social", señala el caminante por la paz, como lo llaman en Colombia.

Y subraya: "Dentro de esa problemática es lógico que entre la devolución de los secuestrados y la entrega, por su parte también del gobierno, de los presos guerrilleros".
Hasta el momento el gobierno de Uribe ha rechazado el planteamiento de las FARC de crear una zona franca, desmilitarizada, que sirva como escenario para realizar el intercambio de presos por secuestrados.
Se cree que en Colombia existen alrededor de 3.000 personas secuestradas, tanto por grupos alzados en armas como por delincuentes comunes.
El tema de los secuestros en Colombia cobró relevancia en julio luego de la muerte de 11 legisladores que habían sido plagiados por la guerrilla. El hecho llevó a manifestaciones masivas de protesta en varias ciudades de Colombia.
La marcha de Moncayo pone de nuevo el tema sobre la mesa.