Identifican posible causa genética de este desórden del sueño que afecta a mucha gente. Las consecuencias de dormir mal van desde ansiedad hasta padecimientos orgánicos.
Varios factores de riesgo asociados al Síndrome de las Piernas Inquietas, un trastorno de tipo neurológico que perturba la calidad del sueño, han sido identificados, según un estudio publicado por la revista Nature Genetics.
El Síndrome de las Piernas Inquietas afecta a entre el 5 y el 15% de las poblaciones europeas y americanas.
Su frecuencia varía en función de las poblaciones (2% entre las personas originarias de Ecuador, 3.2% de Turquía, O.1% de Singapur y 4.6% entre los japoneses de edades avanzadas) y la edad (un 1% en niños americanos en edad escolar).
Caracterizado por una necesidad imperiosa de mover las piernas durante la noche o en estado de reposo, esta patología desencadena trastornos del sueño y, según la revista, un aumento de las enfermedades cardiovasculares.
Suele además llevar aparejados movimientos periódicos del sueño, como por ejemplo el estiramiento de un pie, que generalmente pasan desapercibidos por el paciente. Estos movimientos involuntarios van acompañados de desvelos de corta duración que son los responsables de los insomnios.
La investigadora alemana Julianne Winkelman, del Instituto de psiquiatría Max Planck de Múnich, y sus colegas, han establecido una relación genética tras haber estudiado a 401 individuos con antecedentes familiares del citado síndrome y una muestra de mil 644 personas en Alemania.
Posteriormente, confirmaron los resultados con estudios realizados en ese mismo país y Canadá.
Los investigadores concluyen que existe una asociación entre el Síndrome de las Piernas Inquietas y una variante de un gen denominado BTBD9, así como con otros dos genes, en particular el MEIS1.
Trastornos
Cuando una persona duerme, pero no descansa, podría padecer un trastorno del sueño.
Existen diversas causas que alteran el sueño. El Síndrome de Piernas Inquietas es una de ellas y puede ser tratado. Para ello es necesario consultar a un neurólogo.
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Visita de Robo-Doc
El robot RP-7, desarrollado por In-Touch Technologies de California, EE.UU., tiene cámaras, micrófonos y una pantalla, además de un control remoto que permite guiarlo por las habitaciones del hospital.
De esta manera, el médico, en este caso el doctor Alex Gandsas, puede supervisar personalmente a su pacientes aunque no se encuentre físicamente en el lugar. “El Robo-Doc permite estar en cualquier parte del mundo y seguir en el hospital”, dijo Gandsas. El RP-7 tiene un precio que ronda los US$150 mil.
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